viernes, 31 de mayo de 2013

Ve tras el sueño

Hubiese sido más fácil seguir en mi trabajo. Continuar en mi oficio de periodista deportivo, pues no habría tenido que tomar ningún riesgo, pero hubiese sido el camino del cobarde y aunque me hubiese ido bien en el periodismo, como de hecho ocurría, habría sido terriblemente infeliz.

A inicios del 2013 llegó a mí un sentimiento fuerte, como jamás me había ocurrido. Mi sueño, mi misión en esta vida me estaba llamando, reclamando. Aunque siempre lo había intuido (porque siempre intuimos todo) esta vez llegaba con una fuerza única, muy poderosa, imposible de evadir. Esta misión, que es mi sueño más anhelado, la razón por la que estoy en este mundo, la misión que Dios puso para mí, es comunicarme con ustedes, con mis hermanos. Liberarme para después tenderles la mano, pero no como un mesías ni nada parecido. Sino como un hermano, simplemente.

Basta de no ser nosotros mismos, basta de limitarnos, basta de darle la espalda al sueño, para hacer lo que quiera la sociedad. Vinimos al mundo a ser libres y felices, y eso solo lo conseguimos cuando seguimos al sueño, cuando seguimos al corazón. Todos tenemos una tarea en este mundo, una misión que cumplir. Esa misión está en tu corazón, tú la conoces. Nosotros siempre sabemos, solo que por miedo no queremos ver nuestro camino. 

Si quieres ser feliz debes seguir al sueño, que te liberará, te hará pleno. Es tu naturaleza, por lo tanto, no requerirá del esfuerzo agotador, porque cuando estás en lo amado el esfuerzo no te cuesta. Te sentirás como pez en el agua.

Ser libre y feliz está en tus manos, depende solo de ti y de tu decisión. No prestes atención a los comentarios de los pesimistas fracasados, que al no tener la valentía de seguir al sueño quieren contagiar su temor a los demás. Pero no eres una pluma que se la lleva el viento con facilidad. Tienes la potestad de ser y hacer lo que quieras, y llevar la vida que quieras. Ve tras tu sueño, aférrate a él, no lo sueltes, sé constante ante las pruebas que te pone la vida, y el éxito está garantizado. Es una ley que no falla.

 La vida es simple, recuerda: si quieres lograr algo grande debes estar dispuesto a hacer un gran esfuerzo. Simple. Pero tampoco olvides que cuando trabajas por lo que amas y en lo que amas, el esfuerzo no pesa. Se hace con alegría.

Yo tuve que tomar una decisión. Cambiar mi vida y seguir al sueño. Lo hice y aquí estoy. Me siento un hombre feliz, libre. Dentro de mi verdadero camino. Donde, lo sé, tengo el éxito garantizado. Jamás había sentido tanta alegría y paz en mi vida. Me siento como Maradona en el fútbol, Miguel Cabrera en el beisbol, como Picasso pintando. Estoy en mi hábitat, siguiendo mis instintos, mi naturaleza. Y cuando eso ocurre el camino solo es uno: la felicidad, la paz, el éxito, la abundancia. Y la abundancia en todo sentido: espiritual y material.

La vida es para los valientes, el temor es contrario a la vida. El momento es ahora. Sigue a tu sueño y serás quien quieres ser. El mundo, la vida te espera. El que hace lo que ama está benditamente condenado al éxito.